Te adoramos, oh Cristo, y te bendecimos.

«Señor, baja antes que se muera mi hijo». Jesús le dice: «Vete, que tu hijo vive».

Jesús cura a un ciego de nacimiento

Jesús es condenado a muerte

‘¡Oh Dios! ¡Ten compasión de mí, que soy pecador!’

Madre, quiero secar tus lágrimas

Madre llena de dolor, ruega por nosotros pecadores

¡Salve, porque sois el Trono del Rey!

¡Salve, Esposa Virgen!

¡Salve, oh Vos, por Quién ha tomado carne humana el Creador!

¡Salve, oh Vos, por Quién la Creación es renovada!

Nuestra Señora del Rosario

Yo les aseguro que antes se acabarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la más pequeña letra o coma de la ley.

El ángel le respondió: El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios.

¡Salve, Seno de la divina Encarnación!

Ruega por nosotros, santa Madre de Dios, R. para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

Señor Jesucristo, colma nuestros corazones con la luz de tu Espíritu Santo, para que, siguiéndote en tu último camino, sepamos cuál es el precio de nuestra redención y seamos dignos de participar en los frutos de tu pasión, muerte y resurrección. Tú que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. [Juan Pablo II]

En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su patria».

¿Quién es tu prógimo?

Jesús y la Samaritana

"Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo; pero convenía celebrar una fiesta y alegrarse, porque este hermano tuyo estaba muerto, y ha vuelto a la vida; estaba perdido, y ha sido hallado."

¡Oh Señora mía! ¡Oh Madre mía! Yo me ofrezco enteramente a ti y en prueba de mi filial afecto te consagro en este día, mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón; en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo tuyo Oh Madre de bondad, guardame y defiéndeme como a pertenencia y posesión tuya.

Tú Palabra es Eterna !

Si no oyen a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán, aunque un muerto resucite".

El mayor entre vosotros será vuestro servidor.

Jaculatoria. Bondadoso San José, Esposo de María, protegednos; defended a la Iglesia y al Sumo Pontífice y amparad a mis parientes, amigos y bienhechores.

San José creyó, y, porque creyó, fue el primero en adorar Aquel Niño que trajo la salvación al mundo entero

1. DESPRÉNDETE: de tantas palabras huecas y sin sentido: llénate de la Palabra de DIOS. Ella guiará tus pasos hacia la Voluntad de Dios.

¡Salve, porque sois el Trono del Rey!

En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Les aseguro que si su justicia no es mayor que la de los escribas y fariseos, ciertamente no entrarán ustedes en el reino de los cielos.

El que se ensalce, será humillado; y el que se humille, será ensalzado.

En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos. Haced, pues, y observad todo lo que os digan; pero no imitéis su conducta, porque dicen y no hacen.

Dad y se os dará; una medida buena, apretada, remecida, rebosante. Porque con la medida con que midáis se os medirá.

no condenéis y no seréis condenados; perdonad y seréis perdonados.

Sed compasivos, como vuestro Padre es compasivo.

No juzguen y no serán juzgados

El Vive....Vive Jesús el Señor

Jesús dijo: «Os aseguro que quien deje casa, o hermanos o hermanas, o madre o padre, o hijos o tierras, por mi y por el Evangelio, recibirá ahora, en este tiempo, cien veces más –casas y hermanos y hermanas y madres e hijos y tierras, con persecuciones–, y en la edad futura, vida eterna. Muchos primeros serán últimos, y muchos últimos primeros.»

Dios todo lo puede

«Señor, bueno es estarnos aquí. Si quieres, haré aquí tres tiendas, una para ti, otra para Moisés y otra para Elías». Mt.17

«Este es mi Hijo amado, en quien me complazco; escuchadle»

¡Salve, oh Abismo impenetrable aún a los ojos de los mismos ángeles!

San José. Esposo de María

¡Salve, oh Cima inaccesible al humano entendimiento!

¡Salve, Redención de las lágrimas de Eva!

¡Salve, Madre del Cordero y del Pastor!

¡Salve, Restauración del Adán caído!

Somos felices cuando ponemos en Dios nuestra confianza como niños.

¡Salve, oh Vos, por Quién cesará la maldición!

Imágenes Evangelio